El futuro tiene cara de Yao Ming.

La percepción del tiempo es una zorra engañosa que no se puede manejar. Cuando estamos aburridos un minuto nos parece una eternidad, y cuando la pasamos bien se va volando como una vaca en un tornado.
Pero el tiempo también puede pensarse en términos del Dr. Manhattan, como me gusta pensarlo a mi: todo está pasando al mismo tiempo.

Es cuestión de pensar que en este mismo momento, simultáneamente, estamos en jardín de infantes comiendo arena; en el secundario, adolesciendo como adolescentes; besando al ex, siendo abandonados... Todos nuestros dolores y errores juntos, al mismo tiempo ¡Gracias, Alan Moore! (En serio, gracias, sos genial)
De esa misma manera en que lo malo del pasado, presente y futuro conviven en la misma habitación acolchonada, se puede aplicar también a lo bueno: En este mismo momento estamos naciendo (eso es muy bueno, está entre mis cosas favoritas); estamos haciendo nuestro primer amigo; y si miramos al futuro, estamos conociendo al amor de nuestras vidas, completando la carrera, riéndonos de lo que sufrimos por gente ridícula, y todo lo que esperamos que pase y va a pasar.
Si no se puede reír hoy por que duele, no se apuren, pero caminen tranquilos con la certeza de que esos días van a llegar. Quizás si miramos a un costado, o cerramos los ojos y nos concentramos, podemos llegar a escuchar toda esa alegría que viene directo a nosotros. Entonces va a llegar ese momento en que pensemos "¿Por qué estaba tan mal?", y al recordar ponemos cara de Yao Ming.






A Yao Ming también le pasaron cosas, seguro, y miren cómo se ríe ahora. Deje su mensaje y ríase.